Tony Holiday descubrió el blues a los trece años gracias a un regalo de su madre, un álbum de B.B. King titulado “The Best Of”. Fue cinco años más tarde cuando Tony tuvo claro que quería dedicarse profesionalmente a tocar los blues, como así ha sido y sigue haciendo actualmente. Una de las cosas que a Tony más le gustan es organizar sesiones de blues en el porche de su casa rodeado de muchos y buenos amigos músicos para tocar blues de forma distendida, plácida y amigable junto a unas cervezas siempre bien fresquitas. Estas reuniones han dado lugar a la publicación de un par de álbumes hasta el momento, donde se recoge la música y todo el espíritu de camaradería que existe durante las sesiones del porche, además de estar grabados sin apenas equipo y sin recursos técnicos para conservar toda la frescura de esas tardes en el porchs. Si en el primer volumen los músicos que se dieron cita en aquel ‘porche’ fueron James Harman, John Primer, Kid Ramos, Charlie Musselwhite, John Nemeth, Mitch Kashmar y Bob Corritore, en este segundo volumen los músicos que se reunieron fueron Bobby Rush, Victor Wainwright, Willie Buck, AJ Fullerton, Watermelon Slim, su mentor James Harman, Jon Lawton, Lurrie Bell, Richard ‘Rip Lee’ Pryor, Johnny Burgin, Rae Gordon, Ben Rice, Mark Hummel, Dennis Gruenling, JD Taylor y Southern Avenue. Con este plantel tan sobresaliente de estrellas, sólo se puede calificar este disco como imprescindible y definirlo como una gozada impresionante y brutal de blues en todos los sentidos.