Como muchos otros músicos Tinsley Ellis se vio forzado a cancelar su gira del 2020, en la que tenía más de sesenta conciertos ya contratados por delante, en la que presentaba también su último disco “Ice Cream In Hell”. Durante ese tiempo y en el estudio de su casa, Ellis se dedicó a estudiar, experimentar y perfeccionar sus habilidades como compositor, explorando oscuras y antiguos sonidos y grabaciones, léase discos, de algunos de sus héroes como los Allman Brothers, Freddie King, Michael Bloomfield o B.B. King. Dieciocho meses más tarde Ellis había escrito un total de doscientas canciones nuevas.

A partir de abril de 2020 comenzó a publicar este material online, pidiendo a sus fans y seguidores que comentaran y dieran su opinión sobre las canciones. Después de recibir y valorar las respuestas de sus muchos fans, Tinsley Ellis ha seleccionado diez canciones que son las que se incluyen en este nuevo disco para la compañía Alligator y que Tinsley dedica muy especialmente a todos sus seguidores.

En estas canciones nuestro protagonista muestra de forma brillante y enérgica el poder y la destreza que posee cuando expone con habilidad un repertorio formado tanto por blues moderno, como por el clásico Southern rock de los setenta. Junto a la voz y la guitarra de Tinsley Ellis se encuentran Kevin McKendree al órgano y piano, Steve Mackey al bajo y Lynn Williams a la batería, más la colaboración de Jim Hoke al saxo y Andrew Carney a la trompeta en dos canciones.

Un más que interesante y notable álbum que el oyente debería tener muy en cuenta a la hora de seleccionar sus actuales preferencias en cuanto al blues rock más apasionado se refiere.