Nacida en Richmond, California, Tia Carroll ha cantado profesionalmente durante más de treinta años, tanto en solitario como en compañía de Jimmy McCraklin o Sugar Pie DeSanto y con otros grandes del rhythm and blues. Gracias al magnífico trabajo del productor ejecutivo Noel Hayes y de Kid Andersen y Jim Pugh en los estudios Greaseland, tenemos ahora la suerte de tener entre las manos este álbum donde Carroll nos ofrece lo mejor de sí misma a lo largo de once perlas que no tienen desperdicio alguno y de las que tres de ellas son composiciones de la propia Tia Carroll. En todas ellas nuestra vocalista se muestra como una cantante versátil y dotada de una impresionante voz llena de carisma y pasión perfecta para cantar tanto blues como gospel o rock, aunque, en realidad, cualquier género que se le ponga por delante Tia Carroll lo despacha con una genialidad impresionante. Si a ello añadimos que ha contado con un sobresaliente elenco de músicos como Kid Andersen a la guitarra o Jim Pugh al órgano, además de invitados de lujo como Igor Prado o una empastada sección de vientos con los que se consigue crear un clímax cálido e intenso, el resultado no puede ser otro que un disco tan excitante como soberbio en toda su extensión.