El nuevo álbum de The Harpoonist & The Axe Murdered explora con sumo cuidado complicadas disyuntivas tales como que la vida puede devenir por un lado exitosa y al mismo tiempo estar llena de dificultades y que del éxito al fracaso sólo hay un paso Sin embargo, todos los músicos de la banda han conseguido encontrar la inspiración y el camino gracias al ‘electric groove blues’ de los años cincuenta, sesenta y setenta que han sabido transmitir en este álbum Sus influencias pueden encontrarse en músicos tan bien conocidos por los aficionados como Willie Dixon, pero también en la fuerza de tipos como Jack White o Danger Mouse Con todo ello han construido su propio y original sonido grasiento e hiriente, empapado asimismo de soul y mucho funk Shawn Hall nos deleita con potentes y desgarradas inflexiones vocales junto a una poderosa armónica que sopla con vehemencia y persuasión, mientras que su compañero Matthew Rogers, desgrana poderosos solos de guitarra, por supuesto todo ello con la participación de una sección de vientos que consiguen hacer sonar los particulares blues de estos músicos a la perfección