Nuevo trabajo de este excelente músico, productor, compositor etc que nos regala una pequeña obra de arte para todos aquellos amantes de la buena y bailable música negra Swamp Dog sigue los caminos del rhythm and blues con toques soul, un estilo con sonido cercano al de los años setentas Los arreglos de metal son tremendamente efectivos y contundentes e impactan desde el primer momento y, a veces puede recordar al sonido ‘Philadelphia’, Detroit e incluso Tamla Motown En lo que a los blues se refiere, Swamp Dog los atacan con garra y emotividad, creando un climax excepcional, como en el caso de Walkin’ Blues de Amos Milburn, del que nuestro protagonista saca un partido verdaderamente sorprendente En suma, un buen disco que convencerá a cualquier aficionado a la música ‘dance’, al soul festivo y demás formas de entender la música negra