Bélgica posee un gran abanico de buenas bandas que se dedican a tocar e interpretar los blues, una de ellas es la liderada por el cantante y armonicista Steven Troch quien este año ha representado a Bélgica en el European Blues Challenge celebrado en Malmö, Suecia.

Este es su tercer álbum en estudio en el que añade nuevos elementos musicales que enriquecen de forma notable este nuevo trabajo si lo comparamos con sus dos anteriores, aunque, por supuesto, el blues está siempre presente de forma notable y permanente

El disco se grabó en directo en los Robot Studios de la ciudad de Ghent y la mezcla corrió a cargo de Kid Andersen en sus estudios Greaseland de San José, California. Ésta es la segunda vez que Andersen colabora con Steven Troch y se nota que existe un buen feedback entre ambos.

Once canciones propias de amplio espectro, incluido un guiño a la vieja música española, dan forma a este disco en el que Steven Troch a la voz, se encarga de llevar las riendas del mismo, además de tocar la armónica de forma personal y balsámica, mostrando muy buen gusto y una destacable técnica, bien acompañado por Matti De Rijcke a la guitarra y voces, Liesbeth Sprangers al bajo y voces, Bernd Coene a la batería, y las colaboraciones de Luk Vermeir al piano, Bart Vervaeck al pedal steel, John Halbleib a la trompeta y Luigi De Gaspari al trombón.