Con más de dos mil quinientos conciertos realizados y numerosas giras por Canadá y Europa, el cantante y multi-instrumentista Steve Hill es uno de los artistas más prolíficos y reconocidos de la escena canadiense. Lleva publicados once discos y éste nuevo álbum que aquí comentamos se gestó en el otoño del 2016, a raíz un viaje que Steve realizó a California para asistir al festival Desert Trip, en Coachella. Steve Hill quedó tan sorprendido e impresionado por aquel lugar que decidió explorar y viajar por toda la zona. Durante tres semanas visitó y conoció aquellos lugares tan especiales, que le inspiraron muchos de los temas que se encuentran en este disco y en el que también ha aprovechado para incluir algunas de sus antiguas composiciones. Todas las canciones que presenta reflejan con pasión y veracidad un estado mental que quiere compartir con todos los oyentes en estos difíciles tiempos por los que está atravesando la humanidad. Musicalmente hablando, las canciones recogen influencias de la música folk, el country y el rock que, por supuesto, fusiona con el blues. Un trabajo para saborear con calma y tranquilidad una noche cualquiera en el sillón favorito de tu hogar.