Séptimo disco del cantante y guitarrista Peter Veteska en un lapso de tiempo de ocho años. Peter vuelve de nuevo al mercado con un trabajo rebosante de rock-blues de carretera con influencias del blues de la costa oeste. En este disco Peter y su banda han hecho un trabajo exquisito, que tiene todos los ingredientes básicos para que el aficionado disfrute enormemente con cada una de las canciones que se incluyen, ya sean de su propia autoría y que son ocho de un total de doce, o con cuatro versiones que van desde “One After 909” de los Beatles hasta “I Get Evil” de Albert King.

Grabado en el Shorefire Recording Studio de Long Branch, New Jersey bajo la supervisión de Joseph DeMaio, incluyendo los mínimos efectos y overdubs sin utilizar ninguna clase de pedales, el propósito de Peter Veteska ha sido realizar un álbum en estudio sin por ello sacrificar la vitalidad y la espontaneidad de sus actuaciones en vivo para, de este modo, distinguirlo de sus anteriores grabaciones. El resultado es un trabajo lleno de energía e intensidad que comunica las buenas vibraciones, la química y el buen rollo que existe entre él y sus músicos. Además de Peter Veteska a la voz y guitarra, el resto de los participantes son Jen Barnes a la voz en tres canciones, Mikey Jr. a la voz en un tema y armónica en tres, Alex D’Agnese a la batería, los bajistas Coo Moe Jhee, Chuck Hearne y Rick Prince, Jeff Levine al Hammond B-3 y piano, Mike Scott al saxo y Tony Perruso a la trompeta.

Ya que estamos en épocas navideñas, el disco finaliza con el blues “Merry Christmas Baby” que interpretan con un impresionante sentimiento y muchas ganas.