Australiano y heredero de la tradición musical de Eric Sardinas, Johnny Winter, George Thorogood, Leslie West y demás monstruos del power blues guitarristico, Mark Vine nos sumerge en su gótico y personal mundo del blues Arropado por bajo y batería, Mark se dedica a dar rienda suelta a todos sus devaneos musicales, a base de riffs potentes, desenfadados y contundentes pero, sobre todo, de gran efectividad sonora, con excepción del tema I Put Spell On You, de Screamin’ Jay Hawkins, donde también se recrea con efectividad y dramatismo, pero de forma más pausada y agradable Completan el álbum otras seis canciones, cinco de las cuales son originales de Mark Vine, en las que, como ya he comentado, lo que prevalece es su amplia y vistosa gama de posibilidades pirotécnicas y salvajes con la guitarra