La banda Johnny Wheels & The Swamp Donkeys es el sueño hecho realidad del cantante, armonicista y compositor Johnny Wheels “Kennicott”. Su pasión por la música le viene desde que, siendo un niño muy pequeño, asistía a los ensayos de la banda de su padre. Desgraciadamente éste falleció cuando Johnny tenía solo seis años, pero la semilla de la música ya estaba en su interior. Animado por los compañeros y amigos de su padre siguió practicando y aprendiendo a tocar diversos instrumentos. La tragedia volvió a cebarse en él, pues a los doce años y a causa de un terrible accidente, se rompió dos vértebras quedando paralizado desde mitad del pecho para abajo. Después de meses de interminables terapias, su amor por la música le dio la fuerza y la determinación suficientes para, a los veinte años, iniciar una carrera, tocando en diversas bandas y componiendo canciones.

Finalmente ha conseguido montar su propio grupo junto a Brandon Logan a la guitarra y voz y Taylor Frazier al bajo, dos excelentes instrumentistas con los que ha grabado este disco con nueve composiciones del grupo en las que desarrollan con destacable calidad, pasión y buen gusto desde el blues más tradicional, al soul o el rock blues, todos ellos con un impresionante groove y un feeling fuera de toda duda.

Producido por Jimi Bott, quien también interviene como batería en el disco junto a otros invitados como LaRhonda Steele a los coros, Steve Kerin al piano y teclados y una sección de vientos dirigida por Joe Mack-McCarty, el disco es una buena prueba de la potencialidad de este artista que ha superado todas las dificultades hasta convertirse en una gran promesa que, a pesar de su juventud, ha recibido ya un buen número de merecidos premios y reconocimientos.