¡Impresionante, qué magia, qué sensibilidad, qué frescura, qué duende…! Estamos ante la que fuera reina blanca del blues europeo Su conocimiento del género, su intensidad, su dulzura, su pasión y su entrega por el blues así nos lo han demostrado a lo largo de su corta pero intensa vida y por supuesto por todo el legado discográfico que nos queda de ella Jo Ann Kelly fue una de las pocas mujeres blancas que supo impresionar a las audiencias de USA Su actuación en 1969 dentro del marco del Festival de Blues de Memphis fue un auténtico triunfo, arrancando frases de admiración de personajes como Mississippi Fred McDowell o Rufus Thomas, quienes se encontraban presentes en ese memorable día Simplemente decir que tanto Canned Heat como Johnny Winter le ofrecieron la oportunidad de unirse a sus respectivas bandas, aunque ella declinó la invitación de ambos para seguir su propio camino en solitario Este disco que comentamos no tiene desperdicio y, curiosamente, sólo se había publicado en vinilo Ahora ve la luz en cd, más de treinta años después de haberse grabado Una colección impagable de blues de los años treinta en la vena de Memphis Minnie, algo de folk y un poquito de gospel componen este magnífico e imprescindible disco con dieciséis canciones, donde la voz y la guitarra acústica de seis y doce cuerdas a cargo de Jo Ann, además de la colaboración de unos pocos músicos al ‘washboard’, mandolina, bajo, guitarra slide y un par de intervenciones con violín o acordeón, dan como resultado este imprescindible y único álbum que no tiene parangón