Con este nuevo álbum Jeremiah Johnson da en el clavo, presentando una auténtica explosión de ritmo, pasión y blues, y se consagra como un maestro de la guitarra, además de compositor y vocalista.

Nacido en St. Louis, Missouri, Johnson se rodeó muy pronto de los mejores músicos de la zona adquiriendo una gran experiencia que se plasma ahora en este disco con el que vuelve de nuevo a las raíces del rock and roll y de la música de San Louis. Para ello ha contado con un buen equipo a la producción y los controles como son Tom Ruf, Tom Maloney y Paul Niehaus IV, además de un elenco de músicos capaces y versátiles que imprimen rigor y convicción a un más que interesante producto. Los músicos en cuestión son los ya mencionados Paul Niehaus IV al bajo, piano, wurlitzer y guitarra y Tom Maloney a la guitarra y piano, más Joe Meyer a la bateria, una engrasada y poderosa sección de vientos que aportan grandes dosis de swing y ‘rockin’ twist’, Kevin Buckley a las cuerdas, ensambladas armonías vocales a cargo de tres jóvenes vocalistas y las colaboraciones de Victor Wainwright al piano y Brandon Santini a la armónica, estos dos últimos en una canción cada uno.

Diez canciones propias figuran en este trabajo para convencer al oyente y que son un buen ejemplo de la calidad y la madurez que sin duda Jeremiah Johnson ha alcanzado en estos tiempos tan competitivos en el que todos los músicos y bandas desean llegar a conseguir un buen trozo del pastel.