Una brillante obra de la buena cocina de Louisiana, espléndidos platos para degustar una y otra vez que se digieren con facilidad gracias a la excelente mano del cocinero Jeff Chaz Catorce canciones dotadas todas ellas de gran belleza interpretativa con un Jeff más que inspirado tanto en su expresión vocal como a la guitarra El álbum se nutre de funk, blues lentos, algunos en menores, y shuffles, todos ellos perfectamente cimentados sobre bases sobrias a cargo de una sección de acompañamiento competente y efectiva, compuesta por bajo, batería, órgano y piano y que dan el punto perfecto para que nuestro hombre desarrolle todo su potencial creativo Cabe destacar asimismo la sección de vientos que interviene en algunos temas a los que dan realce y vida