Nos llega un disco del cantautor francés Hervé Lechâble con notables y diversas influencias de blues y de la canción francesa que van no sólo de Michael Polnareff a Antoine, sino también de Gilbert Becaud, Jacques Brel, Serge Gainsbourg, Georges Brassens e incluso Charles Trenet.

Durante todos sus años de carrera Hervé ha preferido el contacto directo con el público que acude a sus actuaciones, realizando más de ochenta conciertos anuales, lo que le ha permitido atesorar una gran experiencia y ser conocido entre la audiencia de su país.

Finalmente, y después de un largo trabajo de preparación, Hervé ha decidido grabar su primer disco en el que expresa con humor y poesía un universo de enorme gravedad, pero al mismo tiempo repleto de fantasía y colorido, poniendo en cuestión los problemas cotidianos y la evolución de la sociedad.

El álbum incluye trece temas interpretados en formato acústico, contando con la colaboración de un buen número de músicos que aportan su sensibilidad a unas canciones impregnadas de blues, jazz, chanson y bohemia, en un viaje que nos transporta al corazón de aquellos bistrots y aquellas calles del viejo Paris.