La bostoniana Gracie Curran nos ilumina con su voz agresiva, al tiempo que nos llena de energía y magia con un álbum brillante, robusto y bien estructurado Curran y su banda completan un disco de nueve canciones inspiradas en la música de Etta James como en la de Sharon Jones & The Dap Kings También reflejan su gusto por el gospel, el soul, el blues y el rhythm and blues añejo de la vieja escuela El grupo The High Falutin’ Band son los encargados de respaldar la fértil y voluptuosa voz de Gracie Curran Ellos son Tom Carroll guitarra, Derek Bergman batería, Geoff Murfitt bajo, Bruce Bears, Hammond y una poderosa sección de vientos formada por solo dos nombres, Mark Earley saxos alto y barítono y Doug Woolverton trompeta, más la colaboración especial del ingeniero y co-productor Richard Rosenblatt a la armónica Un disco tremendamente contagioso para todos aquellos que quieran adentrarse en el material de este grupo, que debutan sabroso y a la vez exquisito álbum