Desde que en 2007 Gina Sicilia publicó su primer álbum grabado para el sello Vizztone, su fama como una magnífica cantante de blues y soul no ha dejado de crecer y proyectarse en la escena musical. A partir de aquel momento Gina ha ido ampliando su repertorio incluyendo diferentes facetas de la música Americana con raíces, además de trabajar con excelentes músicos y reputados productores.
Este trabajo ha sido producido por Colin Linden quien inmediatamente ha sintonizado con los gustos musicales de Gina y en especial con el concepto que ella tiene de abordar la música góspel, un estilo por el que siempre ha sentido una gran predilección y con el que se siente muy a gusto cuando lo interpreta.
El álbum presenta diez canciones en los que se combinan clásicos del blues y el góspel con otras canciones más contemporáneas, lo que da como resultado un trabajo hipnótico lleno de emoción e impregnado de sutilezas cromáticas en el que, tanto la voz de Gina Sicilia como la guitarra y la voz de Colin Linden brillan a gran altura, bien respaldados por Johnny Dymond al bajo y Bryan Owings a la batería. Además de este combo se encuentran las distinguidas colaboraciones de Janice Powers y Kevin McKendree a los teclados y las coristas Ann y Regina McCrary a las armonías vocales.