No cabe duda de que nos encontramos ante uno de los mejores músicos innovadores de la armónica en el blues y uno de los instrumentistas de mayor técnica, aunque ello no significa que Carlos se escape del lenguaje del blues propiamente dicho Sus discos siempre son desmesuradamente pretenciosos y, por encima del sentimiento, prima la técnica y ese querer demostrar siempre su habilidad y la técnica que posee a la armónica El disco que comentamos está bien para todas aquellas personas a la que les gusta el sonido de la armónica amplificada y quieran disfrutar de fraseos técnicos, complicados e imaginativos y así aprender algunos trucos aunque, en la mayoría de casos, lo que realmente busca el aficionado al blues es que la música que escucha suene a blues En Steady Movin’ hay influencias y estilos varios, desde Paul Butterfield hasta Toots Thielemans o Howard Levy, que van del blues al jazz, pero especialmente de este último En definitiva, un músico con muchas medallas encima pero con poquito blues en el corazón Eso si, los músicos que le acompañan son también de lo mas eficiente y la producción final es realmente impecable