Verdaderas leyendas del blues de Chicago reunidos por última vez en un homenaje póstumo Carey Bell a la voz y la armónica junto a su hijo Lurrie a la guitarra dan una verdadera y magistral lección de pundonor y de cómo debe sonar el blues más emocional y profundo, salido del interior de uno mismo A pesar de que Carey Bell ya estaba enfermo, suena mas vivo y ‘low down’ que nunca Respaldado por Bob Stroger al bajo, Kenny ‘Beedy Eyes’ Smith a la bateria y Roosvelt Purifoy al piano junto a algunos otros invitados, el disco es un auténtico regalo para todos los amantes del género Doce temas entrañables, llenos de una intensidad única y emotiva, que fueron grabados desde tres lugares diferentes, los cuatro primeros desde el Rosa’s Lounge, los cuatro siguientes desde el Buddy Guy’s Legends y finalmente los cuatro últimos desde la casa de su hijo Lurrie en formato acústico Ya sea en cd o en dvd este disco de despedida debe figurar en cualquier colección de blues que se precie