Un grupo clásico de blues por la manera de interpretarlo y el concepto que establecen en el momento de confeccionar el repertorio, profundamente entroncado en las raices de la música afroamericana, el swing y la música tejana, con guiños a T-Bone Walker y alguna concesión al jazz como el tema Zuyder Zee Blues, además de la incorporación como invitado de Chris Hammond a la armónica cromática, en una excelente aportación Catorce buenos temas, todos ellos escritos por el líder de la banda, el guitarrista, cantante de voz cálida, percusionista y ocasional bajista Peter Corrigan, un músico totalmente volcado en su trabajo, cuya pasión musical sabe trasmitir con eficacia, no sólo a su bajista Chuck Brome y a su batería John Nichols, sino también al público que acude a sus actuaciones, donde suelen cosechar grandes éxitos además de vender una considerable cantidad de copias de sus cd’s cada vez que finalizan el set Si os gustan los trios cálidos, con sonido y solos de guitarra limpios y cristalinos, a base de diferentes modelos de Epiphone, Fender Telecaster y National Tricone Resonator, os aseguro que vais a disfrutar con este disco