Vuelven todos aquellos sonidos honkers, jazzy, jumpy, bluessin’ de los antiguos 40’s Ambos discos son frescos, espontáneos, calientes y en ellos se dan cita los vibrantes solos de saxo a cargo del incandescente Elliot Chavers, que con su tenor, su alto y su voz reúne a un buen ramillete de musicos, destacando James Smith a la trompeta, que le dan soporte y réplica a sus espontáneos solos Ambos discos son el reflejo de los estilos que Chavers suele exponer en su repertorio Al margen de standars como Chicken Shack, Pink Champagne, The Honeydripper o Rock This Mother’, Chavers tambien incluye un montón de temas de factura propia, tanto cantados como instrumentales La magia de los tres cds radica en esa felicidad que se respira a lo largo de todo el minutaje Destacar que Bad Mudda Strutta está mejor grabado y producido que el registrado en directo desde Holanda