Después de iniciarse en el rock siendo todavía un adolescente, Peter V se decepcionó de la música y estuvo veinticinco años completamente alejado de los escenarios En su madurez volvió a descubrir sus habilidades en el swing, el jive y el blues, estilos que habían influido en sus gustos musicales y que nunca habían desaparecido por completo de su mente, volviendo así a conectarse con la música y a sentir en lo mas profundo de su ser que tenía que volver de nuevo a los escenarios para interpretar esos géneros que hasta el momento no ha abandonado y de los que demuestra ser un excelente intérprete Este es su tercer álbum desde su regreso y realmente ha valido la pena esperar tanto tiempo, pues Peter es un artista completo que ha desarrollado una imponente forma de cantar que inmediatamente conecta con el oyente Asimismo su forma de tocar la guitarra es limpia, elegante e impoluta, lo que confiere a sus canciones un feeling y un swing impecables Once canciones donde el blues, el swing, junto a algunas pinceladas de jump, rock y jazz fluyen con una innegable belleza estilística, perfectamente arropadas por una banda de gran calidad y enorme calibre