Tal como nos cuenta Liz Mandeville, este álbum se grabó durante un período de tres años y sucedió de la siguiente forma Una noche Liz recibió la llamada del guitarrista Scott Ellison Estaba en Chicago con su banda y no encontraban hotel para dormir Liz les ofreció su estudio a cambio de que grabaran tres temas con ella Al año siguiente se repitió el mismo episodio, en esta ocasión con el guitarrista italiano Darío Lombardo quien también pagó el favor grabando tres canciones Aquel mismo año la guitarrista Rachelle Coba fue nominada a los Blues Blast Awards viajando a Chicago… y ¿qué ocurrió? Que se alojó en casa de Liz grabando tres canciones mas para ella El último tema de este álbum que comentamos Liz lo grabó con la colaboración del guitarrista japonés Minoru Maruyama Con todo este material Mandeville se encerró en el estudio junto a Jim Godsey para hacer las mezclas, añadiendo además algún que otro solo de guitarra a cargo de Doug Deming, quien se los envió por Internet Un buen puñado de músicos de estudio contribuyeron a completar y dar forma a un álbum en el que la Liz nos muestra todo el talento y el dominio de los diversos estilos musicales que ella es capaz de llevar a cabo con gusto y acierto, tanto a la voz como a la guitarra