Hans Theessink y Terry Evans provienen cada uno de países separados por el océano Atlántico, aunque ello no significa que su trabajo conjunto no combine de forma intimista una particular y emotiva belleza que va mas allá de lo que uno a priori pudiera esperar Ambos músicos poseen una dilatada experiencia, pues no en vano su carrera es larga y fructífera, lo que les permite que la voz arrastrada y de barítono de Hans empaste fácilmente con el tono de concepción más gospel de Terry, siempre bajo el denominador del buen gusto y una especial habilidad El álbum se grabó en directo en Viena, Austria y todo el público que asistió a este concierto pudo disfrutar de una intensa y mágica sesión El disco está trufado de temas acústicos interpretados bajo una concepción muy gospel y en la vena de los viejos ‘songsters’ de la primera mitad del pasado siglo También confluyen en el álbum viejas canciones de Huddie Leadbetter, Memphis Slim o JB Lenoir Terry Evans se encarga de poner voz y guitarra a todos los temas, mientras su compañero Hans también canta, toca la guitarra y la armónica En toda la grabación se respira una atmósfera envolvente marcada por la intensidad, el feeling y la enorme comunicación que ambos músicos imprimieron a las catorce canciones aquí incluidas