Heavy rock blues con punkytudes magnéticas y sonido garajero sucio y abigarrado. Este grupo de Tasmania, Australia, viene para romper moldes y estereotipos basados en el blues de los doce compases. El dúo formado por Liam Guthrie guitarras, lap steel, Resonator y voz y Luke Young batería y percusión, mas la intervención de Mick Attard armónica en dos canciones, siembran el terror y el desconcierto entre la audiencia interpretando sus propias composiciones. Los músicos desprenden adrenalina a raudales con la única pretensión de hacer bailar al oyente y pasarlo bien con su sonido gótico y su puesta en escena alternativa y desconcertante. Estoy seguro que los oídos más puristas y ortodoxos no estarán preparados para recibir a Guthrie, no así en cambio el público más ecléctico, atrevido y expectante, dispuesto siempre a enfrentarse con las nuevas generaciones de radicales y novedosos sonidos amplificados. Si os gustan grupos como The Beards, Black Japan o The Bloodpoets, entonces estos son vuestros chicos.