Blues, baladas y neo-soul rocoso y de calidad, con buenas dosis de swing, ‘groove’ y fraseo de regusto jazzy Geoffrey McBride es un cantante con aptitudes, buenas maneras y un registro vocal realmente interesante Aunque no podría asegurarlo, me atrevería a decir que Geoffrey McBride empezó de pequeño cantando gospel en algún coro de iglesia, por el ‘feeling’ y los giros vocales que imprime a las canciones que aquí se incluyen Los arreglos musicales que nos ofrece en los diez cortes del disco son altamente satisfactorios y de mucha calidad Además los músicos que le acompañan imprimen carácter y denotan una gran técnica instrumental, en especial los guitarras Chris Clifton y Randy Cobb También intervienen el bajista Mark Perrou y nuestro conocido batería de los dos discos citados anteriormente, Richard Love, quien también hace coros vocales junto a Tim Jackson, Tina Carlino y el guitarrista Randy Cobb Finalmente Diki Ross se encarga de tocar piano Steinway, sintetizador, Hammond B-3 y también de los arreglos de cuerda y orquesta Un estupendo álbum que puedo recomendar a los lectores sin temor a equivocarme