Nada tan balsámico como el fluir natural y espontáneo de la voz y la guitarra de Emanuele Fizzotti que, esta vez, nos sorprende gratamente con un álbum rockero, bluesero y bastante atrevido A pesar de no ser todavía muy conocido, Emanuele presenta una hoja de servicios que le avala y le coloca en el lugar que le corresponde por derecho propio A dia de hoy nuestro hombre camina en la dirección correcta y este disco puede catapultarle definitivamente hacia el Olimpo del blues blanco que se hace en Europa Este es un trabajo muy completo y caliente pero, sobre todo, una magnífica oportunidad de descubrir a un músico de ideas claras que tiene muchas cosas que aportar Son diez estupendos temas con composiciones propias y un par de versiones arriesgadas como son, Odds And Ends de Bob Dylan y Lady Madonna de Lennon y McCartney, de las que Emanuele Fizzotti sale airoso e inmaculado Los músicos que intervienen dan todos la talla y se acoplan perfectamente a la labor que de ellos se espera