Si Bob Margolin y Ann Rabson fueran parte de una baraja de naipes, sin duda ambos serian dos ases Admiro a Bob Margolin desde que le descubri a mediados de los años setenta, como integrante de la banda del indiscutible rey de blues de Chicago, la Muddy Waters Blues Band Desde entonces llevo su nombre grabado a sangre y fuego ¡Y qué decir de Ann Rabson! Siempre me consideré un fan de las Saffire-The Uppity Blues Women, porque todas ellas y Ann, en el caso que nos ocupa, tienen los blues muy dentro de sí Escuchar como Ann desgrana los clásicos al piano y también cómo los canta es, en definitiva, soñar con que los ángeles te transportan al paraiso Ambos músicos mantienen una fructífera amistad de más de veinte años y en este álbum realizado en formato de dúo, unen sus fuerzas para iluminarnos y hacernos disfrutar, en doce temas impecables, de la magia y la espiritualidad que encierra el blues cuando está interpretado con el sentimiento y la honestidad que brota de artistas como Ann Rabson y Bob Margolin, no solamente desde el fondo de su corazón, sino también desde lo más profundo de su alma y su espíritu Amén