El cantante y guitarrista Alan Arena había conseguido posicionar dos de sus discos en el Top Ten Chart de New England, cuando supo que su mejor amigo había sido diagnosticado con la enfermedad de Huntington. Alan dejó atrás Boston y su ascendente carrera para viajar y cuidar a su amigo. Cuando pensaba que ya no volvería a tocar más, se enteró de que se abría en Cape Cod un nuevo club y estudio de grabación llamado The Music Room y decidió volver a probar suerte e intentar grabar algunos temas propios. Allí conoció al guitarrista y productor Paul Nelson, ganador de un Grammy y durante 14 años guitarrista de Johnny Winter, quien quedó impresionado con el talento de Alan y le propuso grabar un álbum.

Paul Nelson reunió una sección rítmica formada por el teclista Brooks Milgate (Chris O’Leary), el bajista Brad Hallen (Susan Tedeschi, Roomful Of Blues) y el batería Marty Richards (J. Geils Band), además de una serie de músicos invitados como Jerry Portnoy, Milton Smith, Sax Gordon, Allyssa Jones, Joe Russo o Jamie Brown.

Gracias a Paul, Alan pudo tocar regularmente en The Music Room, teloneando a artistas de la talla de Albert Lee, Kim Wilson, Mike Zito, Albert Castiglia Shemekia Copeland o Bernard Allison.

Alan Arena iba también a colaborar en el nuevo disco de Paul Nelson cuando éste falleció repentinamente de un ataque al corazón a los 63 años. Alan quiere que este disco se convierta en un homenaje a su buen amigo Paul, con diez más que interesantes temas, realizados con buenas dosis de calidad, honestidad y buen hacer por un destacable artista que merece ser conocido y apreciado por todos los buenos aficionados al blues.